Me he puesto a buscar españolas e inglesas que fueron reinas
en el otro país y he descubierto una lista mayor de la que imaginaba. Además,
hubo también muchas españolas reinas en Francia, aunque esta cuestión no vaya a
ser objeto de ésta entrada.
Mi primera sorpresa fue en relación a Ricardo Corazón de
León. Recordaréis que es el rey de Inglaterra
que aparece en las películas de Robin Hood cuando vuelve de Palestina,
de la 3ª Cruzada, a liberar al pueblo de la opresión Normanda. Si os fijáis,
veréis que nunca aparece su esposa, yo desde luego nunca la recuerdo en estas películas. Pues bien, la mujer que se casó con él fue una princesa
navarra, hija de Sancho VI de Navarra, el Sabio: Berenguela de Navarra, reina
de Inglaterra, duquesa de Normandía, Condesa de Anjoux y Señora de Le Mans.
Aunque él llevaba comprometido con una princesa francesa desde
la infancia, deshizo este compromiso y se casó con Berenguela. Pero… no fue un
enamoramiento romántico, misterioso, legendario… da la sensación, cuando
lees sobre este tema, de que la madre de Ricardo, Leonor de Aquitania, lo
persiguió por media Cristiandad hasta que consiguió que se reunieran en
Sicilia. El no parecía estar interesado en matrimoniar, pero se casaron finalmente en Chipre, el 12 de mayo de 1191. Si es cierto
que Berenguela había nacido en 1165,
tenía 26 años, muy mayor para la época, pero las fechas varían
de unos documentos a otros.
Sepulcro de Berenguela
Por otra parte, y volviendo a las películas, no es extraño
que Berenguela no aparezca en ellas, porque nunca llegó a pisar Inglaterra.
Ricardo tampoco se prodigó: paso entre seis y ocho meses a lo largo de toda su
vida allí. De hecho, a pesar de ser reyes de Inglaterra, están los dos enterrados en Francia, aunque en lugares
distintos. Los restos de Berenguela, que es la que nos ocupa aquí, descansan en
la abadía cisterciense de L’Epau, cerca de Le Mans, al suroeste de París. Los
restos de Ricardo, por expreso deseo suyo, fueron repartidos entre tres lugares
distintos.
Claustro - Abadía de L'Épau - Francia
Además de no haber llegado nunca a ver la tierra de la que
era reina, tampoco disfrutó en exceso de la presencia de su marido, que primero
se fue a las Cruzadas, luego fue hecho
prisionero en Alemania, tuvo que ir a Inglaterra a ser coronado rey por segunda
vez, debido a que tanto su padre como su hermano Juan sin Tierra lo
cuestionaban como rey, y Berenguela no
fue con él, puesto que se sabe, como ya he dicho, que nunca estuvo en
Inglaterra. Parece ser que pasaron un año juntos, y él murió antes de que
comenzara el siglo XIII, en 1199. No tuvieron descendencia.
Berenguela pasó viuda algo más de treinta años, y murió el
23 de diciembre de 1230. Como reina viuda, conoció un acontecimiento muy
relevante: la batalla de las Navas de Tolosa, en la que tuvo una participación
notable su hermano, Sancho VII de Navarra, conocido como Sancho el Fuerte.
También en su época, en 1216 se fundó en Francia la orden de los Dominicos, en
el contexto de la lucha contra los cátaros. Su fundador fue Sto. Domingo de
Guzmán, de Caleruega, en Burgos.
Debido precisamente a todos estos
acontecimientos, algunos muy trascendentes, y a la fuerte personalidad de su marido, ella ha quedado siempre en la penumbra. Además, era mujer y en la Edad Media. Como consecuencia, es raro encontrar a alguien que alguna vez haya ni tan siquiera oído hablar de su existencia.
Tanto la relación matrimonial llena
de ausencias que tuvieron Berenguela y Ricardo, como la forma de entender el
poder por parte de Ricardo y la de ella de sobrellevarlo a él, así como el empeño
de Ricardo en llevar a cabo la 3ª Cruzada, responden a la cosmovisión medieval.
A pesar de todas estas
circunstancias, fundamentalmente la ausencia de ambos en Inglaterra ni siquiera
una vez muertos, los británicos le han
rendido honores cuando la situación así lo ha requerido: el lugar del enterramiento
de ella ha cambiado varias veces. En la más reciente, el traslado de sus restos
se hizo con su correspondiente protocolo de reina de Inglaterra, himno inglés
incluido. Además, a principios del siglo XX, una locomotora del sistema de
trenes británico llevó su nombre, que en inglés es “Berengaria”.
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